El goleador paraguayo, Roberto Ovelar, sorprendió esta noche a los asistentes al estadio Metropolitano, al saltar a la cancha con una bandera de su país.

Ovelar salió orgulloso con el símbolo de su país y la exhibió ante la tribuna.

Se trató de una manera de protestar por la crisis institucional que vive su país luego que 25 senadores, sin la presencia del resto de legisladores ni del presidente del Senado, aprobó la reelección presidencial de Horacio Cartes, en 2018, lo cual generó la airada reacción ciudadana.

“Se puede engañar a parte del pueblo parte del tiempo, pero no se puede engañar a todo el pueblo todo el tiempo. Hermanos paraguayos, colegas futbolistas, que el gobierno sienta y vea nuestra protesta, salgan a sentarse en la cancha, que no se juege fútbol profesional en Paraguay, protestemos en contra de un gobierno que viola la constitución, que se sienta nuestra voz y se den cuenta que no podemos seguir permitiendo sus groseras decisiones”, escribió previamente sus cuentas de redes.

“Que no se sigan sirviendo de nosotros haciéndonos creer que que nos sirven, que no siga la burla al pueblo, hagamos parte de la solución. ¡No se juega fútbol, con dictadura! ¡Dictadura nunca más!”, instó el atacante juniorista.

Su rechazo a las dictaduras paraguayas no es gratuita. De hecho, su padre fue condenado a muerte por Alfredo Stroessner Matiauda, quien le puso precio a su cabeza.

Stroessner fue un militar, político y dictador paraguayo, quien fungió como Presidente de la República entre el 15 de agosto de 1954 y 3 de febrero de 1989. Es decir, ejerció una dictadura durante 35 años.